La relación de dobles y mitades de tiempo o cantidades de luz hace que disponemos de una lectura inicial, podamos realizar otras exposiciones siempre compensando el cambio que realicemos; es decir, imaginemos que la lectura inicial es de 1/60 y f 5,6 y necesitamos una velocidad mas rápida, por ejemplo de 1/125, para que la película quede igualmente expuesta debemos ponerle un diafragma de f 4, ya que el obturador se abra y se cierre un punto mas rápido, nos entra la mitad de luz que en la lectura inicial y debemos abrir el diafragma un punto para que nos entre el doble de luz, de esta manera volvemos a conseguir que la película reciba la luz necesaria para que quede bien expuesta.
Significa simplemente que todo cambio hecho en una de las variables que controla la exposición se compensa actuando sobre la otra.
Dicho de otra forma las velocidades de obturación y las aberturas de diafragma son intercambiables.
Al cambiar la velocidad, por ejemplo, cambia la forma en que se registran los sujetos móviles, porque la velocidad de obturación afecta a la representación de la acción.